El Censo General del Departamento de Arica, llevado a cabo por las autoridades chilenas el 23 de diciembre de 1917, muestra que de un total de 3.067 personas, 898 poseían nacionalidad chilena, 1.368 eran peruanos y 776 eran bolivianos. En cuanto a desarrollo urbano, en las primeras década del siglo 20 la ciudad contaba con calles empedradas con cantos rodados o con ladrillos de cemento. Al primer decenio se remonta la empresa de luz eléctrica (1912), con un alumbrado público en base a lámparas de acetileno y de petróleo; donde el agua para el consumo humano se obtenía de pozos ubicados en los patios de las viviendas.
Entre los edificios que van surgiendo se encuentran el mercado, la refinería de azúcar (1912), la cárcel, el Regimiento Rancagua (1924) y el célebre Hotel Pacífico (1924-1925). Unos 145 establecimientos comerciales dinamizaban la vida comunitaria. En el aspecto cultural, comienza a construirse el Teatro Municipal. El cuerpo de Bomberos se constituía de las Compañías Salvadora Unión Ariqueña, la Bomba Peruana Zapadores Nro. 1 y la Compañía Bernardo O´Higgins (1912). Para 1920 la ciudad contaba con 8.829 habitantes, aumentando a 12.939 en 1930.